"Cerrar el Inta sería como pegarse un tiro en el pie"

"Cerrar el Inta sería como pegarse un tiro en el pie"

Luego de la contundente carta que desde el Consejo Regional Córdoba del Inta le enviaron a las autoridades nacionales de ese Instituto planteando su oposición a las reformas que impulsa el Gobierno en el esquema de gobernanza de la entidad, la respuesta hasta aquí fue la convocatoria a una reunión con el secretario de Agricultura de la Nación, Sergio Iraeta, para el 10 de junio, lo que marca el nivel de urgencia que los funcionarios nacionales le asignan a la problemática.

Mientras tanto, en el organismo reina la incertidumbre, en medio de rumores. Se habla de una reestructuración general que comenzaría con la conformación del directorio (desde su fundación con participación público-privada) pero que tendría finalidades mucho más allá de una simple redistribución y quita de sillas en la mesa principal.

En ese marco, las versiones proliferan, desde las extremas que hablan de un cierre del Inta, hasta otras que consideran posible una fusión con el Inti.

Sobre ese punto, el titular del Inta en Córdoba, Pablo Panatti, con origen en Coninagro, aseguró a Tranquera Abierta que “cerrar el Inta sería pegarse un tiro en el pie”.

Concretamente para el presidente del Consejo Regional Córdoba del Inta, “si el INTA se llegara a disolver sería como darse un tiro en el pie porque generará lo contrario a lo que pretende el gobierno. Porque el producto que genera el Inta es todo ese material que surge de las investigaciones, de la cartera programática y que después por extensión se transfieren al productor que aplica en su campo y son las que aumentan la producción de granos del país; es una relación directa. Y no hablamos sólo de granos, estamos hablando de economías regionales, estaciones experimentales que trabajan con yerba mate, papa, tabaco, fruta, de todo. Ni hablar con ganadería y los mejoramientos genéticos.El Inta tiene técnicos excelentes, referentes nacionales, con posgrados hechos en universidades extranjeras, y referentes internacionales también.

Disolver el Inta entonces atentaría contra el principal motor económico del país...

Hacer eso sería atentar contra la producción agropecuaria o un modelo agroexportador como tiene Argentina. Así que no creo que ocurra, el Gobierno creo que a eso lo sabe y no creo que vaya por ahí. Y en cuanto a una fusión, se habló en un momento de fusionar con el Inti, pero después creo que esa idea ya se había descartado y se habló de que lo que podría hacer el Inta es absorber algunas áreas que tiene el Inti vinculadas a temas de leche, carne.

La semana pasada enviaron desde el Consejo Regional Córdoba y en conjunto los presidentes de las 21 unidades que tiene el Inta en todo el país, cartas planteando su preocupación a las autoridades, ¿tuvieron alguna respuesta?

Si vamos al comienzo, la inquietud surgió por una reunión que tuvimos los presidentes de los centros regionales hace dos semanas en forma virtual, vía zoom, con el presidente del Inta, Nicolás Bronzovich, y la vice, “Pilu” Giraudo. Pedimos esa reunión virtual porque estaban muy fuertes las versiones de que había un decreto del Poder Ejecutivo Nacional orientado a modificar la composición actual del Consejo Ejecutivo Nacional.

¿Cómo sería eso?

El Consejo Ejecutivo Nacional, por ley de creación del Inta, hace casi 70 años, está conformado por representantes del sector público y del sector privado. Del privado están los representantes de los productores, o sea, las cuatro entidades, más los grupos Crea. De la parte pública, pero no gubernamental, está la Facultad Agronomía Veterinaria, y de la parte gubernamental están el presidente y vice, que son designados por la Secretaría de Agricultura, más un representante de la Secretaría. Desde la década del ‘50 que tiene esa composición que siempre ha funcionado muy bien. De hecho, el crecimiento de Inta fue siempre bajo ese sistema de gobernanza. Lo que se pretende ahora, según las versiones, sería que el Consejo pase a tener ocho integrantes: los de las cuatro entidades, y cuatro de parte del gobierno, de los cuales sigue el presidente y vice, el vocal del gobierno, y se sumaría una silla más. De esa silla más no se sabe si va a ser alguien del Ministerio de Economía u otro más de Agricultura.

¿Desaparece Crea y desaparece la Facultad de Agronomía y Veterinaria?

Claro. En un momento se rumoreó que la silla extra sería ofrecida a CREA, pero CREA obviamente la iba a rechazar porque no está de acuerdo con esta modificación. Pensemos en el caso de que el Consejo Directivo Nacional deba decidir o votar algo para una resolución, por el tema que sea, un empate cuatro a cuatro coloca al presidente del Inta a desempatarporque tiene voto doble. Entonces siempre va a decidir el Gobierno. Entonces es como entregarle el mandato de Inta directamente al Gobierno. Además, la parte presupuestaria o ejecución del presupuesto estaría bajo la órbita del Ministerio de Economía y el Consejo estaría para decidir sobre la parte operativa. Entonces realmente no solo es romper un sistema de gobernanza que ha sido virtuoso y que ha funcionado durante muchos años.

¿Esto alcanzaría también a los consejos regionales, que también tienen una conducción mixta?

El presidente nos dijo que el decreto no modificaría la composición de los consejos de los centros regionales, pero no tendría ningún sentido que yo en el centro regional tenga representantes de comunidad científica, de universidades, de grupos Crea y ellos no tienen su representante a nivel nacional. Y después nos preocupa también el tema de la pérdida de autarquía, y esto es una opinión personal, pero veo con esto mucha centralización en Buenos Aires. Y el Inta es un ente autárquico que toma sus propias decisiones, maneja su presupuesto, y es como que perdemos esa identidad, esa autarquía.

Es lo que expresaron en las cartas enviadas a los funcionarios...

Claro, la nota dirigida desde el Centro Regional Córdoba, que yo firmé, y la que enviamos todos los Presidente, mostraban el desacuerdo con este decreto de modificación. Ahora, sí estamos de acuerdo, y dispuestos a hacer cambios en Inta, porque queremos un Inta mejor. Hay cosas que reestructurar, cosas que cambiar, para que funcione mejor. Es más, yo le dije al mismo presidente Bronzovich que más allá de que le mandemos esta nota, desde los centros regionales siempre vamos a estar dispuestos a charlar y a discutir un plan de mejora, de reestructuración, para tener un Inta más eficiente, pero para funcione mejor. Porque si es realmente para perder autarquía, o resentir la operatoria del Inta, en eso no vamos a estar de acuerdo.

Además de una mirada mucho más centralista, ¿Qué otras consecuencias puede tener esto en la práctica?

Consecuencias va a tener de todo tipo, porque, como decía, al modificarse la estructura del órgano de gobernanza que toma las decisiones, impactará cuando se tenga que resolver acerca de la firma de convenio de vinculación tecnológica, temas presupuestarios, de recursos humanos, de cartera programática para proyectos de investigación. O sea, el órgano decisor es el Consejo Directivo Nacional, por ende, cualquier cambio en su composición va a afectar directamente la operatividad del Inta.

¿Y qué mejoras ofrecerían estos cambios?

Bueno, yo le pregunté a Bronzovich qué mejoras concretas traería, y no tuvimos una respuesta concreta. No nos dijeron ‘esto lo vamos a hacer porque va a mejorar tal y tal cosa’. Entonces, no vemos realmente en forma clara qué ventaja puede tener. A mí no me cabe duda que, conociendo a Bronzovich, seguramente debe tener las mejores intenciones, que esto va a ser para mejor, pero bueno, nosotros no lo tenemos claro.

¿Y entonces?

Lo que le ofrecimos es seguir discutiendo, seguir charlando una reestructuración, una mejora, pero en forma virtuosa, y respetando la institucionalidad del Inta.

¿Hubo respuestas?

Sí, casualmente en estos días uno de los presidentes de los centros regionales gestionó luego de la nota para ver si obteníamos respuestas y si nos daban la reunión, y recibió un mail del secretario de Agricultura de la Nación, para recibirnos en Buenos Aires el 10 de junio. Así que, bueno, tomaron aviso de la nota y nos propusieron esta reunión. La idea era ver si podíamos adelantar esa fecha, porque de acá al 10 de junio nos parecía un poco extenso el plazo. Pero bueno, actualmente estamos en esas gestiones para ver si se puede tratar de ver si podemos adelantar la fecha. Y después tenemos que también ver quiénes van a asistir porque hay 21 presidentes en total, que son 15 de centros regionales y 6 de centros de investigación.

Volviendo a los centros regionales, en su caso es un presidente que proviene de las filas de Coninagro, no es un político...

Exacto. Yo soy delegado por Coninagro y ya estoy en mi segundo período de consejero. Mi mandato termina en septiembre del año que viene, junto con la presidencia. Después en el Consejo hay seis de la parte privada, donde están las cuatro entidades, los grupos Crea, los representantes de los consejos locales, asesores de las estaciones experimentales, hay consejeros de la comunidad científica, hay consejeros de la Universidad de Córdoba, de Río Cuarto, y una consejera que es representante de los técnicos de Inta más uno del gobierno provincial.

Entonces, si avanzan los cambios esta conformación múltiple también desaparecería...

En un principio, lo que nos comentó Bronzovich, si bien no está presentado el decreto, solamente afectaría la composición del Consejo Ejecutivo Nacional, no la de los centros regionales. Pero yo pienso que a la larga va a terminar afectándola porque no le veo mucho sentido a instituciones o entidades en un consejo regional si no tienen ellos sus delegados a nivel nacional. Entonces, por ahora se dice que los centros regionales no y la investigación tampoco, pero bueno, no conocemos todavía la redacción del decreto.